Cuando vampiros y brujas , monstruos y calabazas ocupan el colegio y lo hacen suyo, un divertido terror está garantizado. Y eso ocurría el miércoles 31 de noviembre. Sin sorpresas ya, porque viene siendo habitual, que en honor a la cultura inglesa que estudiamos, la tradición de halloween sea también un poco nuestra ( pero, eso nunca, sin olvidarnos del puñao de los Santos, que es muy mucho nuestro y también tuvo su ratito de conversación en las aulas). Pues, esos dias de disfraces y terror permitido, vinieron con el tradicional teatrillo que voluntariosas madres prepararon para los más pequeños. Combinar el miedo y el humor es obligado, cuando se trata de divertir a los niños de infantil, y lo consiguieron a base de peculiares fantasmas. El broche de oro lo pone nuestro concurso de calabazas. Hay que decir con orgullo y satisfacción, que cada año los chicos y chicas de 6º se superan en creatividad y habilidad, provocando respetada y divertida...